Por Daniela Paz (@dnlpz)
Cuando uno se vuelve corredora todo el mundo lo sabe. Esto es obvio porque mucho cambia en ti, sobre todo los hábitos. Aunque yo jamás he dejado su traguito y salir con los amigos, hay algo en ti que se vuelve diferente. Eso siempre trae comentarios de todo tipo, algunos simpáticos, alentadores y otros, bien raros. ¿Los han escuchado?
Y no te cansas…
Obvio que me canso, como cualquier persona que hace ejercicio y hace calor y se transpira y pasan horas dándole a un mismo ritmo.
Cómo te fue en la carrera ¿ganaste?
Sí, gané una naranja, unos vasos de agua y hartas calorías menos que recuperé en un bacán desayuno.
Me encantaría correr como tú
Correr es tan fácil como simplemente hacerlo. Así que si te decides correr un día, unas semanas, unos meses, podremos salir juntos y pasarlo bien.
¿No te aburres?
¡Nunca! Para mí no hay nada más entretenido que estar al aire libre, con tu música, generando endorfinas. Igual acepto que hay momentos fomes, cuando te dan puntadas, te ahogas, te cansas mucho y no sabes por qué. Pero al final se pasa bien igual.
No corro ni para tomar la micro
(Sin comentarios)
¿Escuchaste de la persona que murió en una carrera?
¿En serio? Obvio que he escuchado de lesiones terribles e incluso muertes, pero de seguro alguien también murió jugando cartas y no tenía que ver mucho con ese hobby. Me imagino que el porcentaje de gente a la que le hace bien correr y que le ha generado incontables beneficios es mucho mayor que el que ha tenido problemas.
Correr la hace mal a las rodillas
De todos los comentarios, este es el que más se repite. Realmente si te cuidas, encuentras la zapatilla perfecta para ti, vas con cuidado, las rodillas estarán en perfecto estado. Hace peor quedarse sentado, para tus articulaciones, para el corazón, pulmones y salud mental.
¡Corre Dani corre!
Será la cita a Forrest Gump el comentario más repetido de la historia?