Hay unos que trotan solos, pero otros que disfrutan la compañía de alguien al lado. Un buen compañero de running es esencial para esos días que no quieres correr sola, pero no todos se acomodarán a tu estilo. A mí me gusta hacerlo de ambas formas, pero si voy a correr acompañada, debe ser con alguien que tenga las características que enumero en este post.
Por Daniela Paz ( @dnlpz)
- Tienen que tener un nivel similar o saber adaptarse. Si te va a andar apurando y no quieres, no es la idea. También no te gusta ir lento o correr poco, no vas a querer una salida frustrada.
- En mi caso a mi compañero tiene que encantarle el troteyuno si es en la mañana, o el trote – servirse – una – cosita- si es en la noche. Nada mejor que auto celebrarse.
- Tiene que haber confianza, al menos yo nunca he corrido con gente que no conozco bien. Con mis amigas o mi pololo, puedo pedirles que vayan más lento o cambiar el lugar si no les acomoda. Para eso hay que tener una buena onda previa.
- Le tiene que gustar correr. Esto es obvio, pero mis mejores compañeros de running aman correr, lo pasamos bien, cuando terminamos estamos felices y nos gusta planear una nueva salida.
- El mejor compañero de running es el que te motiva, desde despertarte temprano para salir, a aumentar tus kilómetros, subir un cerro o a correr más rápido. Por eso es importante tener uno con el que te guste hacerlo, porque tendrás alguien con quien compartir y con quien alegrarte por tus y sus logros.