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5 claves para dominar el ‘correr con coche’

Correr con coche requiere técnica, planificación y mucha paciencia. Pero dominar el arte del running con niños puede ser la solución para nunca dejar de entrenar. Acá les dejamos nuestros mejores consejos para lograrlo.

Correr con coche…no es lo que más me gusta, pero a veces no queda otra alternativa que cumplir con el entrenamiento corriendo con tu hijo en coche. Y ¿por qué no es mi situación ideal? Porque inevitablemente la postura se resiente, la velocidad baja y hay que estar atenta no solo a tus sensaciones si no también a los tiempos de tu hijo/a quien tiene que ir cómodo y feliz.

Pero correr con coche también tiene cosas buenas. La más importante: haces parte a tu hijo de lo que te hace feliz, y eso lo hará entenderte más cuando salgas sola, pero también lo motivará a hacer deporte en un futuro.

Elegir el coche: No fue fácil la elección de un coche y, ahora que lo analizo, no sé si tomé la mejor decisión. Compré un coche con mucha amortiguación y resistencia, pero grande y no tan liviano. Les recomendamos elegir un coche para correr, no un coche que sirva para correr sino uno diseñado especialmente para esa función, les dará estabilidad, amortiguación y seguridad. Eso si uno pequeño y liviano, que no tenga tantos compartimentos ni accesorios que agreguen peso.

Considerar la edad de tu hijo: Las mamás que están ansiosas de retomar post parto, deberán tener paciencia porque se recomienda comenzar a correr en coche pasados los 6 meses o idealmente un poco más…cuando la cabeza del niño ya esté estabilizada.

La hora adecuada: Esto se establece mediante ensayo/error. Para algunos niños y mamás lo ideal es que sea antes de una siesta para que el movimiento los canse y se duerman en el trayecto; para otras, lo mejor es saliendo de una siesta o con un niño descansado para que vaya descansado mirando el paisaje e interactuando con el recorrido. Yo opto por la segunda, y a mi hija le encanta.

Menos es más: Las mamás somos expertas en llevar cosas ‘por si acaso’ y muchas veces ser mamás precavidas nos ha salvado de algún ‘percance’. Pero cuando corremos con coche cada peso extra se nota. Recomendamos elegir distancias cortas y cercanas a la casa y llevar lo menos posible dentro del coche.

Cuidar la postura: Este es el último punto, pero el más importante. Las que corren con coche sabrán que los brazos y la espalda se resienten. Al correr el movimiento de los brazos nos da impulso yequilibrio, con el coche los brazos van estáticos y eso hace que el movimiento no nos sea natural. Ir con los brazos relajados, ni tan cerca ni tan tirante, y elongar la zona superior post entrenamiento es clave para que no sobrecarguemos el tronco.

por

Josefina, periodista, corredora aficionada y editora de Ladyrun.

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