• Invierte en una banda de celular con una funda de calidad. Esto quiere decir que sea de un material amigable con la piel y transpiración, que tenga velcros resistentes y ajustables, que sea ligera y sobre todo, con costuras que no provoquen heridas por roce.

 

• Siempre usa una banda diseñada para la medida de tu celular. Si llevas uno muy grande o pequeño terminará por incomodarte al correr. Además, fíjate que tenga pantalla táctil, para que puedas manejar el teléfono sin tener que sacarlo de la funda.

 

• Aprovecha los bolsillos secretos que tienen algunos modelos para llevar llaves, tarjetas o la siempre bienvenida ‘luca’ de emergencia.

 

Si hace frío o no quieres que la banda de celular vaya directamente sobre la piel, puedes usarla sobre poleras de manga larga, primera capa o chaqueta de running.

 

• Para ponértelo, primero introduce el celular, luego enchufa los audífonos y finalmente ajústalo a tu brazo. Debe quedar apretado, pero no causar enrojecimiento o molestias.

 

• No existe una altura y lado únicos para llevar esta banda, así que prueba distintas posiciones y preocúpate de que no roce demasiado con la parte lateral del tronco.

 

• Nunca uses por primera vez una banda en una carrera. Ya les hemos advertido que el día de una competencia no es el momento de estrenar nada, menos accesorios que tienen contacto directo con la piel como bandas de brazo o cintura.