Necesitamos movimiento. La rutina laboral, por desgracia, nos obliga a pasar demasiadas horas quietas. Pero estar inmóviles, además de ser perjudicial para la salud en general, también afecta al rendimiento deportivo. El cuerpo está diseñado para moverse, de ahí que el no hacer por un tiempo prolongado afecta a los músculos, ralentiza la circulación y disminuye la eficacia de los quemadores de grasa.
Por eso, es importante romper los ciclos de sedentarismo cuando no estamos entrenando con pequeños cambios que activan los músculos y compensan los efectos de estar mucho rato quietas. No se trata de ponerse a hacer burpees en el trabajo, pero sí de movernos más, porque al final del día todo suma.
¡Acá te dejamos algunas formas prácticas para estar siempre en movimiento!
- Haz pausas activas.Afortunadamente cada vez son más las empresas que aplican esta método; se trata de pequeños breaks en medio de la rutina laboral para hacer una breve rutina de ejercicios y estiramientos. Sí, al principio da como plancha, pero se pasa rápido.
- Incluso sentada, muévete.Cuando estés en tu escritorio balancéate de vez en cuando para acomodarte, mueve tus articulaciones, siéntate derecha y pon atención en tu respiración.
- Párate y camina. Aprovecha todas las excusas para pararte de su escritorio. Por ejemplo, si vas a comprar un café no esperes a que pase el ‘carrito’ o no se lo encargues a alguien, o si tienes que decirle algo a un compañero(a) no lo llames, mejor acércate a su puesto. Ah! Y muy importante: evita a toca costa comer en tu escritorio, tu cuerpo y tu mente se merecen este break.
- Sube escaleras.Si hay ascensor, siempre privilegia las escaleras, y si trabajas en un piso muy alto, entonces haz la mitad en ascensor y la otra por las escaleras. Y si tienes que el ir al baño, anda al de algunos pisos más arriba, así también estarás sumando escalones.
- Camina o pedalea. Si tienes la fortuna de trabajar cerca de tu casa, entonces no hay excusas para no dejar el auto y ponerte en marcha con las piernas. Incluso si te mueves en transporte público (y andas tiempo) prueba bajándote un par de estaciones antes de tu destino para sumar algunos pasos al día, y además, despejar la cabeza.