Arándanos. Son los reyes de los antioxidantes y su propiedad antiinflamatoria es altísima. Tiene minerales como potasio, cobre, hierro, zinc y manganeso, que ayudan a controlar la frecuencia cardiaca y presión arterial. Elígelos rojos o azules, frescos o congelados, e incorpóralos en tu desayuno y zumos. Además, su jugo es buena para combatir la cistitis.
Moras. Su consumo promueve una correcta función cardiovascular. También ayudan a reducir las grasas, y si están muy maduras, tiene un efecto laxante para quienes sufren de estreñimiento.
Frambuesas. Ricas en ácido fólico y fibra, favorecen el transito intestinal. Ayudan a controlar la presión arterial y tienen propiedades antiinflamatorias y antibióticas. Además, su alto contenido en potasio promueve la correcta función neuromuscular del cuerpo.
Frutillas. Ricas en vitamina C, estimulan el sistema inmune y protegen el organismo del envejecimiento y oxidación que provocan los radicales libres.
Grosellas. Hay rojas, blancas y negras, pero éstas últimas son las que contienen más vitamina C. Consumirlas de manera regular fortalece el sistema inmune.
A la hora de comprar frutos rojos
-Privilegia siempre aquellos frutos frescos, y si la temporada no lo permite, opta por los congelados. Los frutos enlatados o jugos embotellados pierden muchas propiedades al pasar por los procesos de envasado.
-Mientras más intenso sea el color de los frutos, mayor serán sus propiedades antioxidantes. Así que siempre busca los más rojitos o de tonos vivos.
-Consúmelos de manera natural, evita hervirlos o calentarlos para que no pierdan sus propiedades. Son perfectos para hacer zumos o como ingredientes en bowls de desayuno o para darles un toque diferente a las ensaladas.