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#conchispeza: Preparando Maratón Santiago

Nuestra columnista Soledad Hott se prepara para #MDS2015 y nos cuenta de su experiencia.

Nuestra querida columnista Sole Hott está lista para su revancha en los 21k de #MDS2015. Después de meses de preparación, se siente lista para darlo todo aunque eso haya significado dejar atrás ‘el carrete de su vida’.

Para los que corremos, Maratón de Santiago es el evento del año. Y si te consideras runner sabes que no es llegar y correr. Esta es mi segunda vez inscrita, y si comparo hay una gran diferencia: la preparación. El 2014 iba por los los 21k, sin embargo, no llegué a correrlos. Una herida mal cuidada terminó en una infección en el talón de Aquiles…¡1 mes antes! El doctor me dio permiso sólo para 10k. El señor Aquiles fue una dolorosa señal del destino, porque no estaba tan preparada como creía. Me fui de vacaciones un mes y medio antes, y luego tuve que viajar por trabajo. Iba directo a un mal desempeño y ‘amurramiento’ post, y no hay nada peor que un runner ‘picao’ después de una corrida. En esa ocasión aprendí dos cosas: nunca subestimes una herida y hay que prepararse.
En esta segunda vuelta de la #MDS2015 decidí seguir el plan que habían hecho nuestros entrenadores. Además, complementé con TRX (llevo 6 meses practicándolo y de verdad ayuda). Pero seguir un plan tiene sus exigencias, los sábados de largos implicaron acostarse temprano los viernes, ser la fome del cumpleaños que se toma una copa y se va para la casa y recibir algunos «correr tanto hace mal», «te vas a perder el carrete de tu vida» o «¿por qué llevas tus zapatillas a la playa?».
Hice todos los fondos que correspondían y entrené duro. Pero el trauma del talón apareció cuando llegué al “queda un mes”. Me daba miedo cualquier situación que pudiera terminar en lesión. Excederme en kilómetros, subir el cerro, trotar de noche, etc. Hicimos trekking en Brasil hace un poco más de un mes y cuando terminamos pensé “esta es el última aventurilla”, lo mismo con el Manquehuito hace un par de semanas…no más, por ahora.

Un plan de entrenamiento asusta al primer vistazo. Ves la cantidad de semanas divididas en kilómetros, fartlek, PF, etc., y ¡miedo! Pero las semanas vuelan. Si no pudiste correr un largo el sábado, lo puedes hacer el domingo. Las repeticiones se pueden hacer solo, como un amigo del equipo que las hace en México. Teniendo las ganas y la disciplina, se puede. Ya sean 21 o 42 hay que cuidarse y cuidar al compañero, sufrir con los masajes descontracturantes, apañarlo cuando le tocan 22k y a ti solo 18, «no importa, te acompaño con 20». O para darle ánimo cuando ya terminaste tus 15 y a él le quedan 15 más.

Pasan los años y la preparación no disminuye. Con el tiempo no solo se acumulan kilómetros, sino experiencia para comprender el correr y aprender que no es llegar y decir “hoy corro 42k”. Es mi 4ª media maratón, estoy lista y la diferencia la hace entrenar. Es posible que el mayor porcentaje de inscritos tenga ese pensamiento, pero correr largas distancias no se ve fácil, porque efectivamente no lo es.

por

Josefina, periodista, corredora aficionada y editora de Ladyrun.

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